Un óvalo simétrico resume todo su universo creativo y lo hace reconocible al primer golpe de vista entre la multitud de propuestas artísticas existentes. Es Boris Hoppek, artista contemporáneo alemán que reside en Barcelona. Inició su carrera como grafitero -entonces Forty-, disciplina que no ha abandonado aunque ahora la desarrolle solo en zonas rurales por expreso “consejo” policial. Creador de murales y de construcciones arquitectónicas en cartón, ha diseñado incluso una topografía propia. El grafitero fue seducido por la publicidad para realizar la campaña de un coche alemán: creó The C´Mons, una banda ficticia de rock con sus características muñecas, que ha aparecido en multitud de anuncios. También publica Lavagina, revista irónica de sexo. En Cádiz produjo gran impacto su obra 86 negritos, un barco lleno de hombres negros flotando en el mar que denunciaba el tráfico de seres humanos.



Esta web utiliza 'cookies' propias y de terceros. Al navegar o utilizar nuestros servicios, aceptas el uso que hacemos de las 'cookies'.Aceptar Leer más Privacidad y política de cookies